- 60% de la superficie cañera nacional, 500 mil hectáreas, están afectadas en diversos grados de daño.
- San Luis Potosí, Tamaulipas, Veracruz y Quintana Roo, los Estados que reportan mayor afectación y áreas con perdida total de la cosecha.
- Imprescindible establecer mecanismos de atención para atenuar las pérdidas y evitar consecuencias no deseadas.
Ciudad de México a 8 de septiembre de 2019. Una prolongada sequía se ha dejado observar en el territorio nacional, afectando mayormente las zonas de producción de caña de azúcar. Las regiones de la Huasteca Potosina, del Sur de Tamaulipas, el Estado de Veracruz, Quintana Roo, Tabasco y Campeche, reportan las mayores afectaciones. “El temporal de lluvias llegó con retraso y las lluvias de invierno fueron escasas o nulas, lo cual afecta a todas las regiones productoras de caña que se ubican en 15 Estados de la República, informó el presidente de la Unión Nacional de Cañeros CNPR, ingeniero Carlos Blackaller Ayala.
Este fenómeno de sequía prolongada ha sido más severo en las Regiones Productoras de los Estados del Noreste, Golfo y Sureste, en los que se cultivan con caña de azúcar más de 500 mil hectáreas, 60% de la producción Nacional. Estamos observando una gran proporción de afectación tasada como grave o crítica, se refiere a plantaciones con pérdida de rendimiento en más de un 40% y una gran cantidad que incluso no serán cosechadas por tratarse de perdida total. En el caso de la caña, el cañero pierde doble, por una parte la cosecha actual y al tratarse de un perene, también se pierde la cepa del cultivo. Los niveles de daño que hemos observado y que nos reportan de las regiones señaladas, podrían significar una merma productiva de 15% de la producción nacional o mayor, dependiendo de la regularización de las lluvias en esta temporada.”, informó el presidente de la UNC – CNPR.
Agregó que se han observado plantaciones totalmente destruidas. La regularización de las lluvias que pudiera darse a partir de este mes de septiembre detendrán el deterioro, pero la acumulación del daño no es reversible. Con datos de la Unión Nacional de Cañeros, A. C. – CNPR, las estimaciones de perdida de producción de azúcar para la zafra 2019-2020 son de 500 a 900 mil toneladas, derivado de la perdida de cultivos y reducción en los rendimientos de campo en las 840 mil hectáreas de caña que se cultivan en 15 estados del país. En la pasada Zafra 2018-2019, se cosecharon 805 mil hectáreas, con una producción nacional de azúcar de 6 millones 425 mil toneladas de azúcar. A esta actividad se dedican mas de 180 mil cañeros, se abastecen 51 ingenios azucareros y la cadena agroindustrial genera mas de 500 mil empleos. El valor bruto de la producción de azúcar llega a alcanzar los 80 mil millones de pesos.
El líder de los productores de caña de azúcar de la CNPR, advirtió sobre la urgente necesidad de atención a esta contingencia, llamando al involucramiento de todas las autoridades en los ámbitos municipal, estatal y federal. “Es urgente la participación gubernamental en apoyo a mecanismos y estrategias que ayuden a atenuar los efectos negativos y establecer medidas o acciones para evitar consecuencias no deseadas, particularmente en las regiones productoras, donde los efectos de la sequía reducen el ingreso económico y negativamente incidirán en el nivel de empleo rural.”, señaló Blackaller Ayala.
La Unión Nacional de Cañeros, hace un llamado conjunto a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural y a los Gobiernos Estatales, para iniciar de inmediato, junto con los productores de caña de azúcar y los Industriales Azucareros, mesas de trabajo para dimensionar el problema, analizar propuestas de solución y estrategias concretas de atención y previsión conforme a las características productivas de cada una de las regiones afectadas.
Blackaller Ayala insistió en la importancia que tiene para el país, la agroindustria de la caña de azúcar, al involucrar a más de 13 millones de personas que residen en los municipios productores de caña de azúcar, quienes de forma directa o indirecta están vinculadas con el desarrollo del sector.